Los pasteles salados son una excelente propuesta culinaria para días de fiesta, comidas informales, cenas de fin de semana… Quedas de maravilla, son vistosos y fáciles de preparar. En esta ocasión yo me he decantado por un pastel de salmón y gambas hecho sobre una base de hojaldre. Si no queremos complicarnos la vida, podemos utilizar las láminas de hojaldre envasado que venden en los supermercados, ya sea congelado o refrigerado. No hay que decir que el resultado será mejor si nosotros mismos hacemos el hojaldre, pero el echar mano de vez en cuando de productos envasados es una solución rápida que nos puede sacar de más de un apuro.
Si no tenemos hojaldre, o no queremos usarlo, este pastel salado también puede hacerse con una base de masa quebrada y quedaría tipo quiche. Puede consumirse tanto caliente como frío, lo que hace de este plato una excelente propuesta para tomarlo como tapa o como aperitivo.
Además, este tipo de pasteles y tartas saladas son una forma ideal de que los niños coman pescado, verduras y esos alimentos que les cuestan un poco. ¡Es una tarta, no un plato de pescado!
Además, el salmón no solo es saludable para tus hijos, sino para toda la familia, ya que contiene los famosos ácidos grasos omega-3, que contribuyen a regular los niveles de colesterol en sangre. Además, aporta proteínas de alto valor biológico y vitaminas del grupo B.
Dicho todo esto, seguro que quieres saber cómo se hace este pastel de salmón y gambas. ¡Pues vamos a verlo!
Utensilios necesarios
- Un molde para tartas de unos 26-28 cm de diámetro
- Unas varillas
- Un rodillo de cocina para estirar la masa (opcional)
Ingredientes para hacer el pastel de salmón de gambas
- 1 lámina de hojaldre
- 1 cola de salmón de unos 400 o 500 gr
- 150 gr de gambas
- 400 ml de nata
- 4 huevos M
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- pimienta
- sal
- aceite de oliva

Cómo se hace el pastel de salmón
- Primero, preparamos la tartaleta que nos servirá de base para el pastel. Estiramos la lámina de hojaldre y cubrimos con ella el molde. Reservamos en la nevera.
- Precalentamos el horno a 180°.
- Después, picamos el ajo y cortamos la cebolla en brunoise, es decir, en dados pequeños y regulares. Calentamos aceite en una sartén, donde doramos el ajo durante un par de minutos. Seguidamente añadimos la cebolla y la pochamos a fuego medio durante unos 12 minutos, hasta que esté bien blandita. En este paso podemos agregar un pellizco de sal para ayudar a que la cebolla vaya soltando el agua.
- Cuando esté la cebolla lista, añadimos las gambas y el salmón a la sartén. Salteamos durante un minutito, lo justo para que el salmón comience a tomar color. Reservamos esta preparación.
- Seguidamente, batimos los huevos en un bol con la ayuda de unas varillas. No hace falta que cojan mucho aire, que queden como para hacer una tortilla.
- Cuando los tengamos listos, añadimos la nata y la mezcla de cebolla, salmón y gambas que habíamos reservado. Hemos de vigilar que esta mezcla haya perdido temperatura, pues no conviene echarla sobre el huevo cuando aún está muy caliente.
- Salpimentamos al gusto. Mezclamos bien todos los ingredientes y los vertemos con cuidado sobre la base de hojaldre.
- Horneamos nuestro pastel durante unos 30 minutos. Para ver si está hecho, hacemos como con los bizcochos, pinchamos en el centro con un palillo o una brocheta y comprobamos que no sale nada de masa cruda pegada.
- Ya solo nos queda sacarlo del horno y degustarlo. Podemos servirlo caliente o frío, según lo vayamos a degustar como aperitivo, como primer plato, etc.
Precisamente esta semana hicimos aquí en casa un pastel de hojaldre, 😉
Me apunto este, que tiene una pinta estupenda y encima es de salmón.
Es que el hojaldre da mucho juego! Muchas gracias por tu comentario.
Muchas gracias, poneis unas recetas fáciles y están genial
¡Gracias a ti! Me alegra que te gusten.
Excelentes recetas faciles y sabrosas ideales para las que no tenemos mucho tiempo..
Muchas gracias por tu comentario. Me alegra que te gusten las recetas. Un saludo