El té matcha ha ganado popularidad en los últimos años gracias a su sabor único y a las propiedades que se le atribuyen. Ya no es un producto exclusivo y desconocido, sino que está al alcance de todos. De hecho, comprar té matcha online hoy en día es muy sencillo. Sin embargo, para poder disfrutar de sus matices y aromas hay que saber cómo preparar el té matcha adecuadamente. Sigue leyendo y descúbrelo.
El primer paso: elige un buen té matcha
El té matcha es un tipo de té verde originario de China que, a diferencia de otros tés, se consume en polvo. Con su característico color verde y un sabor fresco con notas herbales, ha conquistado paladares más allá de Oriente. Actualmente no solo se consume como bebida, sino que también se utiliza en la elaboración de postres o en la cocina salada.
La preparación de una taza de matcha perfecta comienza cuando adquirimos el producto. Para obtener los mejores resultados es esencial invertir en un té matcha de calidad. Si es posible, busca una variedad ecológica. Asegúrate de que sea puro y esté fresco. Un té que no está en buenas condiciones ofrecerá un sabor pobre y plano.
Utensilios necesarios para hacer té matcha
Para preparar un auténtico té matcha vas a necesitar unas herramientas específicas. Podrías sustituirlas por unas similares, pero en cuanto te aficiones a esta aromática bebida vas a darles uso.
- Chawan. Es el pequeño bol o tazón en el que se prepara y sirve esta bebida. Suelen ser de cerámica, un material que ayuda a mantener la temperatura del té.
- Chazaku. Es una pieza de bambú alargada que hace las funciones de cuchara medidora. Permite recoger la cantidad adecuada de polvo para preparar una taza de té equilibrada en sabor.
- Chasen. Se trata de una especie cepillo de bambú elaborado en una sola pieza. Se utiliza para disolver el té en el agua caliente. Su diseño ayuda a crear esa espuma delicada que caracteriza al matcha.
- Hervidor de agua con indicador de temperatura. Es opcional, pero resulta muy útil para calentar el agua a la temperatura correcta. En su defecto se podría usar cualquier otro método para hervir el agua y utilizar un termómetro de cocina.
Preparación del té matcha paso a paso
- Comienza calentando el agua necesaria para una taza de té, unos 150 ml, y un poco más. Si es de mineralización débil, mejor. Caliéntala hasta los 80 ºC. No sobrepases esa temperatura, pues el té podría quemarse y resultar demasiado amargo.
- Vierte parte del agua caliente en el tazón o chawan. Muévelo para que el agua bañe el interior del recipiente por completo y deséchala. Repite la operación. De esta manera lavamos y calentamos el tazón.
- Ahora, con ayuda de la cucharita o chazaku, toma 1 o 2 medidas de té matcha, según te guste más o menos intenso, y deposítalas en el tazón. La cantidad recomendada suele ser 2.
- Cuando el agua haya alcanzado la temperatura adecuada, viértela sobre el té matcha. Utiliza el chasen para batir vigorosamente la mezcla realizando movimientos en zigzag, no circulares. Bate hasta que el té esté completamente disuelto y haya formado una espuma ligera de color verde claro.
- Disfruta de tu té matcha inmediatamente. Si lo dejas reposar, el polvo se irá sedimentando en el fondo del chawan.
- Cuando quieras preparar un té matcha frío, una vez hayas obtenido la espuma, pasa el contenido del chawan a un recipiente más grande. Añade agua fría y unos cubitos de hielo. En este caso puedes hacerlo con un poco más de polvo para que no quede demasiado diluido.
- Una vez hayas terminado de preparar tu bebida, aclara los utensilios con agua caliente, sin usar jabón.
Cómo hacer un té matcha latte
El té matcha latte combina el refrescante sabor de esta bebida con la cremosidad de la leche tanto en su versión fría como caliente. Sigue estos pasos para prepararlo.
- Calienta el agua de la misma manera que lo harías para un matcha normal.
- En el tazón coloca dos cucharaditas de té en polvo utilizando la cucharita medidora, añade un poco de agua caliente y bátelas con el chasen hasta obtener la espuma.
- Rellena el tazón con leche caliente, que puede ser del tipo que prefieras. Desde leche de vaca entera, semi o desnatada, hasta tu bebida vegetal favorita.
- Endulza tu matcha latte al gusto, si lo deseas. También puedes aromatizarlo con un poco de canela molida o esencia de vainilla.
- Si te apetece probar la versión en frío, incorpora leche fría y unos cubitos de hielo. Para que resulte aún más refrescante, un toque cítrico de ralladura de limón o lima le va muy bien.
En definitiva, el té matcha es una bebida llena de aromas y beneficios para la salud, como su poder antioxidante o su efecto diurético. Puedes tomarlo caliente, frío o con leche. Lo importante es que sigas estos sencillos pasos para obtener un té matcha perfecto y disfrutar de todos sus matices. Recuerda invertir en un té de calidad y asegúrate de contar con los utensilios adecuados para lograr los mejores resultados.