
¿Quieres hacer unas galletas con 4 ingredientes que están buenas de verdad? Pues prepara esta receta de galletas de maicena y leche condensada. Te sorprenderá el resultado.
Receta de galletas de maicena con 4 ingredientes
Si te ha sobrado un poco de leche condensada de otra receta, puedes preparar estas deliciosas galletas. Llevan 4 ingredientes muy básicos (maicena, leche condensada, mantequilla y huevo) y no necesitas ningún utensilio especial para prepararlas, tan solo unas varillas para mezclarlo todo. Incluso puedes hacerlas con una simple cuchara.
Lo que tienen de especial estas galletas es su textura, ligeramente arenosa y muy suave. Aunque también son aptas para mojarlas en un café, té o en un chocolate. No hay ningún problema. La responsable de aportar esa textura, junto a su característico color pálido, es la maicena (Maizena) o, lo que es lo mismo, almidón de maíz.
Si te gustó la receta de galletas con 3 ingredientes que compartí hace un tiempo, no te pierdas estas galletitas de maicena con leche condensada. Ya verás qué textura tan peculiar tienen.
Ingredientes para hacer galletas de leche en polvo (35 unidades aproximadamente)
- 200 g de leche condensada
- 125 g de mantequilla
- 1 yema de huevo
- 350 g de maicena (almidón de maíz)

Cómo hacer galletas de leche en polvo
- En un bol coloca la mantequilla a temperatura ambiente y bátela ligeramente con unas varillas o con una cuchara hasta que tenga una textura cremosa.
- Añade la leche condensada y mezcla hasta obtener una crema homogénea.
- Agrega la yema de huevo y sigue mezclando hasta integrar.
- Añade la maicena tamizada directamente sobre la mezcla anterior. Hazlo en dos o tres tandas, incorporándola con movimientos envolventes hasta obtener una masa suave y manejable. La textura debe ser blanda, pero sin pegarse a las manos.
- Tapa la masa con papel film y guárdala en la nevera durante 1 hora al menos. Así la mantequilla se endurecerá un poco y esto ayudará a que la forma de las galletas se mantenga durante el horneado.
- Toma porciones pequeñas de masa (del tamaño de una nuez) y forma bolitas. Colócalas en una bandeja de horno forrada con papel vegetal. Aplástalas un poquito.
- Ahora, con la ayuda de un tenedor ligeramente enharinado o engrasado, presiona suavemente cada bolita para dejar la marca de los dientes en la superficie de las galletas.
- Precalienta el horno a 170 °C con calor arriba y abajo. Hornea las galletas durante 12 minutos más o menos, o hasta que veas que los bordes de la parte inferior tomen un color ligeramente dorado. Estas galletas no deben tostarse mucho, tienen que quedar blanquitas. Así conservarán su característica textura.
- Saca las galletas de maicena del horno y deja que se enfríen sobre una rejilla.




Consejos para unas galletas de maicena perfectas
Es importante que la mantequilla esté a temperatura ambiente, porque si no te constará mezclarla con la leche condensada. Puedes darle unos segundos de microondas para ablandarla, pero sin que se llegue a derretir.
Evita poner el horno demasiado fuerte, así como excederte en el tiempo de cocción. Estas galletitas se caracterizan por su color blanquito y su textura harinosa. Si las horneas demasiado pueden quedar duras.
Recuerda enfriar la masa en la nevera. El frío hará que la masa adquiera un textura más consistente y evitará que galleta pierda el dibujo durante el horneado. Hablando del dibujo, no aplastes las galletas demasiado con el tenedor. Simplemente, marca un poco la forma de los dientes, como puedes ver en las fotos.
También es importante que dejes enfriar las galletas completamente antes de guardarlas.
Yo no he añadido ningún aroma a la masa para que así se note el gusto a leche condensada, pero puedes incorporar algún ingrediente que les dé sabor, como esencia de vainilla o ralladura de cítricos.

¿Puedo sustituir la maicena por harina de trigo?
No, ya que la maicena es el ingrediente que aporta esa textura ligera y suave que distingue a estas galletas. Si usas harina de trigo, obtendrás otro resultado, más parecido a estas galletas de leche condensada con chocolate que publiqué hace tiempo.
¿Se pueden hacer sin huevo?
Sí, puedes omitir la yema de huevo, aunque no quedan igual, se deshacen más.
¿Las galletas de maicena se pueden congelar?
Una vez horneadas, no te aconsejo congelarlas, puedes al descongelarlas quedarán con una textura muy mala. No obstante sí, puedes congelar la masa ya formada en bolitas y hornear directamente cuando lo desees, aumentando uno o dos minutos el tiempo de horneado.
Cómo conservar las galletas de maicena y leche condensada
Al tener muy poca humedad, las galletas de maicena aguantan en buenas condiciones hasta 2 semanas. Guárdalas en un recipiente hermético y déjalo a temperatura ambiente. No hace falta que las metas en la nevera.