Las tartas saladas son uno de esos platos que siempre te salvan de un apuro: una comida con amigos, una cena informal, un picoteo… Le gustan a casi todo el mundo y son muy versátiles, pues admiten multitud de combinaciones de ingredientes. Incluso pueden ser una buena opción para que los niños coman esa verdura que tanto les cuesta.
Aunque la versión más famosa de este pastel salado puede que sea la quiche Lorraine, en esta ocasión me apetecía hacer una versión un poco más ligera, a base de calabacines y queso de cabra. Esta verdura aporta una gran suavidad al plato, la cual combina perfectamente con el queso de cabra, de sabor más intenso.
La base de la quiche es una masa quebrada de toda la vida, la cual podemos hacer en casa, o bien comprar en el supermercado, una opción ideal para cuando tenemos prisa. Para hacer la que ves en la foto, yo utilicé una porción de masa quebrada casera que tenía en el congelador, lo cual también es buena elección.
Dicho esto, vamos a ver cómo se hace esta quiche de calabacín tan deliciosa. Ya verás que es muy fácil.
Utensilios para hacer la quiche de calabacín y queso de cabra
- Molde desmontable de unos 26 cm de diámetro
- Rodillo para estirar la masa
- Garbanzos secos o bolitas de cerámica para evitar que la masa se hinche
- Varillas para batir los huevos
- Cuchillo afilado
- Tabla de cortar
Ingredientes para hacer la quiche de calabacín y queso de cabra. Cantidades para 6 personas
- 1 lámina de masa quebrada (comprada o casera)
- 400 g de calabacín (uno grandecito)
- 250 g de puerro
- 4 huevos
- 250 ml de nata para cocinar
- 200 g de queso de cabra tipo rulo
- queso para gratinar
- aceite de oliva virgen
- sal
- pimienta
- nuez moscada
Como hacer quiche de calabacín y queso de cabra paso a paso
Hornear la base de masa quebrada
- En primer lugar, precalienta el horno a 180º.
- Estira la masa con ayuda de un rodillo y cubre el molde. Como harías con cualquier masa para tarta salada, procura extenderla formando una capa fina, pues si es demasiado gruesa el resultado será un poco basto.
- Recorta los bordes para dejarlos a ras del molde. Para ello desliza un cuchillo por la superficie del molde realizando movimientos de dentro hacia afuera del mismo.
- Después, pincha la base con un tenedor y cúbrela con un peso. Esto se hace para que la masa no suba por el centro, pues si lo hace quedaría inservible para la quiche. En el mercado existen unas bolitas metálicas o de cerámica que se pueden reutilizar todas las veces que queramos, pero también puedes usar unos garbanzos o alubias.
- Hornea la masa a 180º durante unos 12 minutos, hasta que tome color. A esto se le llama hornear en blanco. Cuando esté lista, la sacas del horno y la dejas templar un poco.
Prepara el relleno de la quiche
- Corta el puerro y ponlo a pochar en la sartén junto con un chorrito de aceite de oliva. Mientras, corta el calabacín en láminas finas y, a su vez, en cuartos, como puedes ver en la foto que encontrarás más abajo.
- Añade el calabacín a la sartén y sigue pochando las verduras durante unos 10-15 minutos. En este paso puedes agregar una pizca de sal para ayudar a la verdura a que suelte su agua y se cocine con más facilidad.
- Por otro lado, bate los huevos con ayuda de unas varillas y agrégales la nata y la mitad del queso de cabra desmenuzado.
- Cuando del pochado de verduras esté listo, únelo a esta mezcla de huevos, nata y queso. Rectifica de sal y añade una pizca de pimienta y otra de nuez moscada.
- Viértelo sobre la base de masa quebrada, que tenías reservada. Coloca por encima el resto de queso cortado en trocitos y espolvorea con un poco de queso para gratinar.
- Introduce la quiche de calabacín y queso en el horno durante unos 20-25 minutos, hasta que la superficie esté dorada. Para saber si está hecha, introduce un palillo o brocheta en su parte central y comprueba que no sale nada de masa cruda pegada a él, que lo sacas casi limpio.
- Cuando esté lista, sácala del horno, déjala templar. Cuando ya no queme, desmóldala y disfruta de una riquísima quiche de calabacín y queso de cabra casera.
Consejos para preparar la quiche de calabacín y queso de cabra
- Ya te lo he comentado en la preparación de la receta, pero es importante que la masa quebrada quede fina. Al estirarla, vigila especialmente los bordes, que es donde nos suele quedar más gruesa. Así estará ligeramente crujiente cuando la degustemos.
- Si usas garbanzos o judías para impedir que suba la masa, éstos quedan inservibles. ¡Luego no los eches al puchero! Yo los guardo y los uso para otra ocasión.
- Cuando vayas a desmoldar la quiche asegúrate de que está fría o templada, pues te puedes quemar los dedos. Si se ha salido algo de relleno durante la cocción, puede que la parte móvil del molde se quede pegada. En este caso, desliza la punta de un cuchillo entre la masa y el molde. No lo hagas si este es de silicona, pues se puede romper.
- Estas tartas saladas son ideales para animar a los niños a comer verdura. Acompáñala de un poco de ensalada y tendrás una cena perfecta para ellos.
Variaciones para hacer esta quiche de calabacín y queso de cabra tan fácil
- Si te gustan los sabores intensos, prueba a sustituir todo o parte del queso de cabra por un cabrales, un gorgonzola italiano o un roquefort. Si, por el contrario, en casa no sois muy amantes del queso, utiliza un queso crema. Te quedará una quiche muy suavecita pero también muy rica. Si vas a usar queso crema, puedes añadirle un pelín más de sal y pimienta.
- En lugar de masa quebrada puedes emplear hojaldre, que puede ser comprado o casero. También quedan muy ricas las tartas saladas con hojaldre.
- ¿No tienes puerro? Lo puedes cambiar por cebolla; no afectará demasiado al resultado final.
- ¿Quieres una versión más ligera y con algunas calorías menos? Puedes cambiar la nata por leche semidesnatada.
Hoy es mi día de suerte! he encontrado tú página, muy pero muy interesante y con recetas que parecen y se ven riquísimas.
Esta semana que comienza voy a preparar por lo menos cuatro recetas que elegí de tu menú.
Ahora una pregunta yo soy una de esas pocas personas que no les gusta el queso de cabra, con que tipo de queso lo puedo suplementar.
Desde ya gracias y un saludo desde Suecia.
Graciela
¡Hola! Muchísimas gracias por tu comentario, en primer lugar. Y no eres la primera persona que conozco a la que no le gusta el queso de cabra, no te preocupes.
En esta receta lo puedes sustituir por cualquier otro que tenga un sabor un pelín fuerte, porque si no el plato pierde gracia.
Las quiche con queso azul quedan genial también, tipo el gorgonzola italiano o el roquefort francés. Si te parece muy fuerte, un emmental, por ejemplo, también puede valer. Como todo es cuestión de gustos y de ir probando con los quesos que encuentres allí, que seguro que los hay muy ricos.
¡Un saludo!
Hola!! gracias, voy a provar con queso azul (como no se me ocurrió antes).
Suecia tiene quesos buenos pero desde que entramos en la EU llegan quesos muy buenos y de muy buena calidad. lo mismo pasa con los productos de charcuteria.
Saludos