
Decir «horchata» es evocar directamente al verano, a la playa, a pasar la tarde en una terraza disfrutando de buena compañía… Así que me pareció una idea excelente convertir esta bebida tan veraniega en una tarta. Una tarta fría, por supuesto, que estos calores no son para encender el horno. Y para que la horchata no se sienta sola, he incluido en la receta a sus inseparables fartons, esos bollitos alargados que fueron creados expresamente para acompañarla.
Esta tarta de horchata y fartons os va a encantar porque es un postre muy ligero, fresquito y fácil de hacer. Su textura es suave, ligeramente esponjosa, y su delicado sabor a horchata es delicioso. No es un sabor muy pronunciado, por lo que creo que gustará, incluso, a quienes no son muy amantes de esta bebida.
He de reconocer que la idea de elaborar una veraniega tarta con horchata no fue mía, sino de un compañero de trabajo que tiene mucha creatividad. Así que parte del mérito se lo atribuyo a él.
Como podéis comprobar en las imágenes el resultado de la receta es muy vistoso. Pero no os asustéis, ya que esta tarta fría de horchata es más fácil de hacer de lo que parece. ¿Queréis saber cómo hacer una tarta de horchata? Pues ahora mismo os lo explico paso a paso.
Utensilios para hacer una tarta de horchata y fartons
- Un molde desmontable de unos 23 cm de diámetro
- Robot de cocina o varillas eléctricas para montar la nata
- Una lengua repostera o espátula
- Pincel de cocina para humedecer los fartons
- Una cazuela para calentar la horchata
- Un cuchillo para pelar el limón
- Un cuchillo de sierra para cortar los fartons
- Un recipiente para remojar la gelatina
Ingredientes para hacer tarta de horchata y fartons. Cantidades para molde de 23 cm de diámetro
- 500 ml de horchata de buena calidad
- 400 ml de nata para montar (con al menos el 35% de materia grasa)
- 300 g de leche condensada
- 8 láminas de gelatina
- 1 paquete de fartons
- 1 rama de canela
- 1 limón (usaremos solo la piel)
- canela en polvo para decorar (opcional)

Cómo hacer tarta de horchata con fartons. Preparación paso a paso
- En primer lugar ponemos a remojar la gelatina en un recipiente con agua fría.
- Seguidamente vamos a infusionar la horchata. Colocamos la horchata en una cazuela junto con la canela y la piel del limón. Calentamos a fuego medio-alto durante 10 minutos más o menos. De esta manera obtenemos una horchata con aroma a canela y limón.
- Partimos los fartons de manera longitudinal y los disponemos en el interior de nuestro molde hasta cubrir por completo el fondo del mismo. En los paquetes suelen venir 6 unidades, pero igual no os hace falta usarlas todas. Eso dependerá del tamaño de vuestro molde. El mío tenía 23 cm y usé 5 fartons.
- Ahora vamos a humedecer los fartons. En un recipiente separamos unas 5 cucharadas de la leche condensada y otras 5 o 6 de la horchata infusionada. Mezclamos ambos ingredientes y, con la ayuda de un pincel de cocina, vamos untando poco a poco los fartons hasta que estén bien impregnados de líquido. De esta manera la base de la tarta quedará más jugosa y, además, los fartons no saldrán flotando mientras se cuaja la tarta.
- Una vez tengamos hecha la base de la tarta procedemos a hacer el relleno. Para ello añadimos las hojas de gelatina hidratada a la horchata y removemos bien el conjunto hasta que la gelatina se deshaga por completo. Como la horchata aún estará caliente, las hojas de gelatina se diluirán con facilidad.
- Añadimos la leche condensada a la horchata, mezclamos bien ambos ingredientes y reservamos.
- Ahora es el momento de montar la nata. Para ello utilizaremos unas varillas eléctricas. Para que se monte bien la nata tiene que estar muy fría y tener un 35% de materia grasa como mínimo.
- Incorporamos la nata montada a la mezcla de horchata, gelatina y leche condensada, que deberá estar a temperatura ambiente. Con la ayuda de una lengua repostera añadimos la nata poco a poco y la mezclamos realizando movimientos envolventes, de arriba a abajo. De esta manera evitamos que la nata pierda todo el aire y se baje. Trabajamos la mezcla con suavidad hasta que presente un aspecto homogéneo.
- Vertemos el relleno de la tarta de horchata en el molde que habíamos preparado. Lo haremos con cuidado para que los fartons no se levanten.
- Refrigeramos la tarta durante un mínimo de 4 horas para que cuaje. Si la dejamos de un día para otro, mejor, pues la textura quedará más asentada.
- Una vez que tengamos la tarta bien cuajada, la desmoldamos con cuidado.







Cómo decorar la tarta de horchata y fartons
- Una vez esté desmoldada, decoramos nuestra tarta de horchata y fartons con un poco de canela en polvo. Como podéis ver en la imagen, utilicé una blonda de las que se usan para decorar bandejas y platos. Se coloca sobre la superficie de la tarta y se espolvorea la canela molida por encima. Después se retira con cuidado y, ¡tachán!, queda así de bonita la tarta.

En qué molde hacer la tarta de horchata y fartons
Mi molde preferido para hacer este tipo de tartas cremosas es el que aparece en las imágenes. El lateral es desmontable y de silicona, mientras que la base está hecha de cerámica.
Esto nos permite desmoldar la tarta fácilmente y servirla en la misma base, con lo que evitamos el peligro de que se rompa al traspasarla a un plato. El molde lo puedes comprar desde aquí.
Consejos para hacer la tarta de horchata y fartons
- Usad una horchata de calidad, la mejor que podáis encontrar. De esta manera conseguiremos que la tarta tenga auténtico sabor a horchata.
- Os lo comento en la preparación de la tarta, pero es muy importante que tengáis en cuenta estos consejos para que la nata monte bien. En primer lugar, tiene que tener un 35% de materia grasa como mínimo. La grasa es lo que permite que la nata se airee y coja cuerpo. Este porcentaje suele venir indicado en el envase. En segundo lugar, debe estar fría. Si es posible, el recipiente y las varillas con las que vamos a trabajarla también deberían estar fríos, por lo que conviene introducirlos en la nevera una media hora antes de montar la nata. Esta entrada donde os explico cómo hacer crema chantilly encontraréis más consejos.
- Humedeced bien los fartons antes de verter el relleno de la tarta. Si estuvieran muy secos y os hace falta más líquido del que indico en la receta, impregnarlos con un poco más de horchata. Si no están bien mojados puede que comiencen a flotar mientras se cuaja la tarta en la nevera y el corte no se vería tan bonito. Eso sí, la tarta quedaría igual de rica.
- La mezcla de horchata, leche condensada y gelatina deberá estar a temperatura ambiente antes de incorporar la nata montada. Si aún está caliente corremos el riesgo de que la nata se baje.
- Hay que conservar la tarta de horchata y fartons en la nevera, pues con el calor ambiental se comenzará a deshacer.
- Necesitamos solo la parte amarilla de la piel del limón; la parte blanca amarga un poco.
- Para desmoldar la tarta podemos pasar un cuchillo por todo el borde de la tarta para despegarla de las paredes. Si el molde es de silicona, es mejor hacerlo con el lado que no corta hacia delante para no dañarlo. También podemos envolver el molde con un trapo humedecido con agua caliente.
Variaciones de la tarta de horchata y fartons
- Si no encontráis fartons, o no os gustan, la base de la tarta se puede elaborar con galletas trituradas, como si fuera una tarta de queso. Este tipo de bases quedan genial con las tartas frías. No obstante, os aconsejo que probéis a hacerla con estos famosos bollitos, pues creo que es parte de la gracia de la receta. Incluso podéis prescindir de la base al elaborar la tarta. Al llevar gelatina podremos desmoldarla sin problemas.
- Si tenéis prisa podéis prescindir del paso de infusionar la horchata con la canela y el limón. En ese caso tendréis simplemente que calentar la horchata un poco para que se deshaga bien la gelatina.
- Se puede usar gelatina en polvo en lugar de hojas de gelatina. Seguid las instrucciones del fabricante para calcular la cantidad equivalente.
* El enlace a Amazon que aparece en esta página es de afiliado.
No me gusta la horchata, de que otra cosa puede hacerse?
Pues se me ocurre que, en lugar de horchata se puede usar leche merengada, por ejemplo. Así mantienes el gusto a canela y limón. Con leche de almendras también puede quedar rica, aunque será cuestión de probarlo. ¡Un saludo!
La he hecho y está espectacular! Nos ha encantado 👏🏻👏🏻👏🏻 Se queda en mi recetario ❤️ Gracias por compartir!
¡Me alegro mucho!
Hola, muy buena receta. Se puede congelar?
No te sabría responder, nunca he probado a congelarla.