Cómo hacer una receta de pollo marroquí con aceitunas

¿Tienes invitados a comer y quieres sorprenderles? ¿Te apetece preparar un plato aromático y original, pero sencillo al mismo tiempo? Entonces, esta receta de pollo marroquí con aceitunas te va a gustar. Queda buenísimo y es muy fácil de hacer.

Receta de pollo marroquí con aceitunas

El pollo con aceitunas y limón es un plato típico de Marruecos. Suele prepararse en un tajín o tajine, un recipiente especial que permite que la carne se cocine lentamente y quede más tierna. No es frecuente tener este utensilio en casa, por lo que también podemos preparar este pollo marroquí con aceitunas en cazuela tradicional. El resultado es igualmente delicioso.

Uno de los ingredientes estrella del plato, además de las especias, son las aceitunas. Lo ideal es que sean aceitunas sin hueso, lo cual nos facilitará mucho su degustación. En la cocina marroquí, añadir un puñado de este encurtido a los guisos de pollo, ternera o cordero es muy habitual. Aportan un contrapunto ácido muy atractivo que realza el sabor del resto de ingredientes.

Si te gusta incluirlas de manera recurrente en tus recetas o tus aperitivos, puedes comprar aceitunas al por mayor para surtir bien tu despensa. Así podrás disponer de este sabroso encurtido siempre que quieras. Además, si buscas calidad y sabor excepcional, no pierdas de vista a las aceitunas sin hueso Chicón Lebrón, perfectas para degustar solas o para añadir un toque especial a tus platos.

Ya sea para una comida en familia o para disfrutarla cuando tienes invitados, esta receta de pollo con aceitunas estilo marroquí seguramente se convertirá en una de tus favoritas. Anímate a probarla y deja que su aroma te transporte al propio Marruecos sin salir de tu cocina.

Cómo hacer pollo con aceitunas marroquí

1. Empezamos la receta marinando el pollo con las especias. Para ello solo tienes que mezclar el comino, la canela, la pimienta negra, la cúrcuma y un poquito de sal. Añade un chorro de aceite hasta obtener una pasta que untarás bien por los trozos de pollo. Colócalo en un recipiente, tápalo con film transparente y déjalo macerar al menos durante 1 hora en la nevera. Si lo puedes tener más tiempo, mejor.
2. Pasado el reposo, calienta un chorrito de aceite de oliva en una cazuela. A fuego vivo, marca los trozos de pollo hasta que estén bien dorados En este punto no los vamos a cocinar por completo, solo necesitamos que tomen color por fuera, sobre todo la parte de la piel. Cuando los tengas listos, reserva.
3. Por otro lado, pela y corta las cebollas en juliana, es decir, en láminas finas. Pica los dientes de ajo finamente.
4. En la misma cazuela donde has marcado el pollo, echa otro poquito de aceite. A fuego medio, pocha la cebolla y el ajo durante 15 minutos más o menos, hasta que la cebolla quede bien lacia. Incorpora un poquito de sal para acelerar el proceso.
5. Mientras, calienta un pelín de agua y echa las hebras de azafrán. Así soltarán mejor todo su aroma.
6. Cuando tengas la cebolla bien blandita, coloca de nuevo el pollo en la cazuela. Vierte también el caldo y la infusión de azafrán. Añade el medio limón cortado en trozos. Sube la intensidad del fuego y, cuando rompa el hervor, baja el fuego, tapa la cazuela y deja que el pollo se cocine lentamente durante 50 minutos, más o menos.
7. Una vez el pollo esté bien hecho, añade las aceitunas verdes y el perejil picado. Deja cocinar otros 10 minutos más o menos.
8. Finalmente, corrige el punto de sal y sirve tu pollo marroquí con aceitunas recién hecho. ¡Que lo disfrutes!

Consejos para hacer pollo con aceitunas y limón

Puedes preparar esta receta con el corte de pollo que quieras. Yo he usado unos antemuslos, pero también queda muy rico con cuartos traseros, contramuslos, jamoncitos, etc. También puedes usar esta misma receta con un pollo entero, ajustando los tiempos de cocción.

El típico pollo marroquí con aceitunas también suele llevar limón encurtido. Este ingrediente no es fácil de encontrar, por lo que lo he sustituido por medio limón natural. Si tienes curiosidad por probar el limón encurtido, puedes comprarlo en tiendas de alimentación especializadas o incluso prepararlo en casa.

Añade sal, pero con cuidado, sobre todo si usas un caldo de pollo comercial. Tanto este como las aceitunas son bastante sabrosos y corremos el riesgo de que el plato quede salado si abusamos de este condimento. Hablando del caldo. Si quieres que la salsa de tu pollo marroquí con aceitunas quede más gordita, dale unos minutos de cocción extra con la cazuela destapada. Así se evaporará más líquido y la salsa espesará.

Realiza la combinación de especias que prefieras, la mía solo es una sugerencia. El jengibre o el clavo también pueden irle bien. ¿Te gusta el cilantro? Puedes sustituir todo o parte del perejil por esta hierba aromática.

Cómo conservar el pollo marroquí con aceitunas

Aunque recién hecho está delicioso, no pasa nada si tienes que preparar esta receta con antelación. De hecho, como suele ocurrir con todos los guisos, estará más bueno si cabe. Guárdalo en la nevera en un recipiente bien tapado para que otros alimentos no se impregnen de su olor. Puedes conservarlo un par de días.

¿Y se puede congelar el pollo con aceitunas? Sí, puedes hacerlo sin problemas. Acuérdate de descongelarlo poco a poco en la nevera; nada de dejarlo fuera durante horas.