Suaves, esponjosos, fáciles de hacer… Estos muffins de arándanos y queso crema lo tienen todo. Si eres goloso y te gustan los frutos rojos, tienes que preparar esta receta. Queda espectacular.
Muffins de arándanos y queso crema, una receta fácil para cualquier ocasión
Adoro las recetas de muffins o magdalenas, como los quieras llamar. Podemos disfrutarlos en cualquier desayuno o merienda en casa, pero también son ideales para regalar o llevarlos fuera de casa. Además, admiten tantos ingredientes y variaciones que es difícil cansarse.
Los protagonistas de esta receta son los arándanos negros y el queso crema, dos ingredientes que combinan muy bien entre ellos. Al igual que hice en estos muffins de arándanos y yogur, he usado unos arándanos frescos. También se pueden usar arándanos congelados o arándanos secos, los cuales deberías hidratar previamente. Si no te gusta este fruto rojo los puedes sustituir por uvas pasas o dátiles.
Con las cantidades que te facilito y usando unas cápsulas de papel como las mías te saldrán 9 muffins grandes. También puedes usar de los pequeños, los que solemos emplear para hacer magdalenas clásicas. En ese caso, la masa te rendirá más.
Un último apunte. Para que las cápsulas no se abran durante el horneado las colocamos dentro de una bandeja metálica con cavidades. ¿No tienes un utensilio de este estilo? Usa unas flaneras en su lugar.
Si te gusta desayunar o merendar con una rica magdalena entre manos, te propongo otras recetas deliciosas, como estos muffins de plátano y nueces, estas golosas magdalenas de chocolate caseras o mis magdalenas de yogur esponjosas y caseras.
Ingredientes para hacer 9 muffins de arándanos
- 3 huevos grandes
- 200 g de azúcar
- 150 g de queso crema
- 100 g de aceite de oliva suave
- ralladura de 1 limón
- 240 g de harina
- 1,5 cucharaditas de levadura tipo Royal
- 1 pizca de sal
- 180 g de arándanos frescos
Cómo hacer los muffins con arándanos y queso
- Bate los huevos con el azúcar durante unos 4 minutos. Deben quedar bien esponjosos y con un color blanquecino. Puedes hacerlo con una amasadora, una Thermomix o con una batidora de varillas eléctrica. Se podría hacer a mano, pero la masa quedaría menos esponjosa.
- Trabaja el queso crema con un tenedor para dejarlo bien blandito. Para ello es necesario que esté a temperatura ambiente. Añade el queso y bate la mezcla a baja velocidad hasta que se integre.
- Vierte el aceite de oliva y la ralladura de limón. Vuelve a mezclar.
- A continuación, tamiza los ingredientes secos (la harina, la levadura y la sal) y añádelos. A mí me gusta más integrar los secos con una espátula, mezclando con una espátula y realizando movimientos envolventes. No obstante, también lo puedes hacer con el electrodoméstico que estés usando, pero a la velocidad más baja.
- Por último, añade los arándanos previamente lavados. Mezcla con cuidado.
- Si tienes tiempo, deja que la masa repose en la nevera durante 1 hora. Así los muffins esponjarán un poco más durante el horneado. No obstante, este paso no es imprescindible.
- Mientras, precalienta el horno a 210 ºC.
- Cuando tengas lista la masa, repártela en moldes de papel, los cuales habrás colocado en una bandeja de hornear.
- Mete tus muffins de arándanos y queso en el horno. Baja la temperatura a 180 ºC. Hornéalos durante unos 25 minutos.
- Cuando estén listos, los sacas del horno y los dejas templar unos minutos en la bandeja. Cuando ya no quemen, los trasladas a una rejilla para que se enfríen por completo.
Consejos para preparar muffins o magdalenas de arándanos y queso
Recuerda que todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente. Si aún así el queso crema está un poco duro, caliéntalo unos segundos en el microondas para que no forme grumos en la masa.
Para decorar, puedes espolvorear nuestros deliciosos muffins de arándanos y queso crema con un poco de azúcar glas. Otra opción para presentarlos es cubrirlos con un glaseado ligero o con una buttercream de queso, cuya preparación puedes ver en esta receta de cupcakes red velvet.
El tiempo de horneado es aproximado, depende de las características de tu horno, del tamaño de las magdalenas… Para saber si ya se han cocinado, pínchalos con un palillo de brocheta. Si sale limpio, sin nada de masa cruda pegada, están listos.
Acuérdate de dejarlos en una rejilla para que se enfríen por completo. Si los dejas enfriar sobre la encimera de la cocina corres el riesgo de que las cápsulas o papelitos se despeguen del bizcocho.